El empleo de maquinaria en la agricultura posee sus propias características, las cuales son condicionadas por la naturaleza del proceso de producción, y que la diferencian significativamente del uso de maquinarias en otros sectores de producción. (Ej. Industria).
La producción agropecuaria está distribuida sobre una extensa variedad de localidades geográficas con diferentes condiciones de clima, suelo y cultivo.
Se necesita una fuente móvil de potencia que pueda desplazarse en el campo para realizar la mayoría de las labores agrícolas.
El proceso se desarrolla de acuerdo a leyes biológicas definidas, lo cual obliga a la adopción de sistemas específicos de mecanización y en lapsos de tiempo muy corto.
Los requerimientos de mano de obra son estacionales, por temporadas. Esto crea una demanda de obreros para la siembra o la cosecha y posteriormente desocupación de los mismos. No se puede, como en la industria, hacer una contratación permanente de mano de obra, por su carácter estacional.
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